CONSERVACIÓN DE LAS PERAS Y MANZANAS.

Para conservar dichos frutos se escoge un sitio seco(nunca desvanes ni cuevas) y se coloca en el suelo una capa de diez centímetros de espesor de paja de centeno; sobre ésta se arregla un lecho de frutos, que también tendrá un espesor de diez centímetros y que debe polvorearse con yeso; se añade después otra capa de paja de centeno y otra de frutas que también se cubre con yeso, construyendo de esa forma cinco o seis lechos de paja y otros tantos de frutos que se quieran conservar.

No hay comentarios: